Zumalakarregi

En esta vivienda de 91m2, ubicada en el barrio del Antiguo de Donostia-San Sebastián, se ha realizado una reforma integral, en el que ha predominado las necesidades del cliente: funcionalidad, luminosidad, almacenamiento.

Para conseguir amplitud en el piso y que la luz natural llegue a todas las estancias, se ha optado por crear un espacio abierto donde se sitúa el salón y la cocina. Gracias a los grandes ventanales de ambas estancias, se consigue que el conjunto de la terraza y el patio interior sean partes importantes de la vivienda.

En el salón se ha elegido una gama cromática basada en el gris, blanco y beige. Con toques de color turquesa y amarillo, para dar alegría a la estancia. Se ha escogido un sofá de 6 plazas como centro de reunión y una sencilla colección de muebles de almacenamiento enfrente.

La cocina se ha diseñado al detalle. Sencilla, moderna, de colores claros y con materiales de alta calidad, como las encimeras de porcelanico. Un requisito esencial para el cliente era crear un punto de reunión y esto lo hemos conseguido gracias a la amplia isla.

En la habitación principal se ha dado protagonismo a una de las paredes, donde hemos creado un hueco con iluminación propia para colocar pequeños objetos decorativos. Además de disponer amplios armarios y baño propio.

Para la habitación de invitados se ha optado por dar personalidad a los materiales a través del color y las texturas de los muebles y accesorios como la de la madera de pino, el fieltro de la butaca y la lana de la alfombra.

En los dos baños de la vivienda se han realizado el mismo diseño. Paredes de cerámica beige con textura y un mueble de baño con una amplia encimera blanca y cajones. Creando unos baños sencillos y atemporales.

El mobiliario elegido para toda la casa se ha basado en dos premisas: sencillo y funcional.

Este proyecto se ha realizado en colaboración con Arcaya Arquitectos.

Superficie: 91m².

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